A lo largo de nuestro blog hemos hablado en determinadas ocasiones del importante papel que desempeñan los retenedores dentales tras una ortodoncia, siendo clave para conseguir los mejores resultados del tratamiento.
Los retenedores dentales se utilizan durante la retención, que es la última fase del tratamiento de ortodoncia, y su principal función es mantener los dientes en su posición correcta, evitando que puedan volver a su lugar inicial y facilitando que se pueda lucir la mejor sonrisa.
Tal es su importancia, que hemos querido hacer un post en el que te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre los retenedores dentales tras una ortodoncia.
¿Cuántos tipos de retenedores dentales existen?
Retenedores dentales fijos
Los retenedores dentales fijos son un pequeño alambre de acero inoxidable de alta elasticidad, que se adhiere a la parte interna de los dientes. En función de cada caso, los retenedores se podrán colocar únicamente en los incisivos, o también en los caninos o primeros premolares. Su principal ventaja es que resultan muy estéticos y el paciente no tiene que preocuparse en colocárselo diariamente.
Retenedores dentales removibles
Los retenedores dentales removibles tal y como su propio nombre indican, se pueden poner y quitar, facilitando de esta forma la higiene bucal diaria del paciente. Por lo general, este tipo de retenedores se utilizan únicamente para dormir, aunque tras la fase final del tratamiento se suelen llevar un número determinado de horas diarias que dictamina el ortodoncista.
Existen dos tipos de retenedores removibles:
- Retenedores Vacuum: este tipo de retenedores se caracterizan por ser unas planchas de PVC, diseñadas para recubrir la superficie dental en su totalidad, pasando casi desapercibidos a la vista.
- Retenedores Hawley: se trata de una base de resina que se adapta al paladar, unida a un arco de metal que rodea los seis dientes anteriores, manteniéndoles en su correcta posición. Cuentan con un gancho en cada molar que permite que el aparato se mantenga fijo. La principal ventaja que ofrecen estos retenedores es que permiten cierto movimiento, algo beneficioso si existiese alguna pequeña recidiva. Aunque no son los ideales para todos los casos de ortodoncia.
Será el especialista en ortodoncia el que decidirá cuál es el retenedor más adecuado en función de cada paciente.
¿Por qué es tan importante utilizar retenedores dentales tras una ortodoncia?
Con la ortodoncia los dientes adquieren una nueva posición, y si no se utilizan retenedores al finalizar el tratamiento, es posible que los dientes volvieran a su posición inicial (recidiva), echando al traste todo el trabajo realizado con la ortodoncia.
Hay que tener en cuenta que durante la ortodoncia, para conseguir que los dientes adquieran una posición correcta, se realiza una manipulación de los tejidos óseos y elásticos. Finalizado el tratamiento, los dientes precisan de un tiempo para adaptarse definitivamente a su nueva posición, siendo fundamental el uso de retenedores, para evitar que puedan volver a la posición que tenían previamente.
Además, otros factores como la masticación, la presión de los labios o de la lengua, podrían provocar la mala posición de las piezas dentales
Otras funciones de los retenedores dentales
Más allá de mantener los dientes en la posición correcta tras un tratamiento de ortodoncia, los retenedores dentales cumplen con otras funciones que permiten solucionar diferentes problemas:
- Problemas con el empuje de la lengua:
Aquellos pacientes que muestran la lengua a través de los dientes al hablar, encuentran en los retenedores a su mejor aliado, permitiéndoles mantener la lengua dentro de la boca al hablar.
- Afecciones temporomandibulares (TMD):
Esta afección surge como resultado de un problema con la mordida, en el que los dientes no se tocan correctamente, debido a una maloclusión de la boca (boca cerrada).
- Tratamiento para el bruxismo:
Los pacientes que aprietan excesivamente los dientes, pueden poner solución a este problema a través de los retenedores dentales como las férulas de descarga rígidas tipo Míchigan.
Consecuencias de no utiliza retenedores dentales tras un tratamiento de ortodoncia
Aunque todo dependerá de cada paciente y del comportamiento de sus dientes, si no se utilizan retenedores dentales tras una ortodoncia, los dientes podrían moverse y recuperar la posición que tenían antes del tratamiento.
Dicho esto, lo ideal sería llevar los retenedores de manera permanente, durante la mayor parte del día o noche. En el caso de los retenedores removibles, deberían retirarse para comer y también para cepillarse los dientes.
El tiempo que cada paciente deberá utilizar retenedores lo indicará el odontólogo, a través de las correspondientes revisiones.
Mantenimiento de los retenedores dentales
Por último, es importante hablar del correcto mantenimiento de los retenedores dentales, que será clave para que cumplan su función y nos ofrezcan los mejores resultados.
Aquí hay que diferenciar el mantenimiento de los retenedores fijos y removibles:
En el caso de los retenedores fijos, hay que prestar una especial atención durante el cepillado, ya que es habitual que se produzca una acumulación de sarro alrededor de los dientes. Si esto ocurre, sería recomendable utilizar cepillos específicos recomendados por los especialistas, así como hilo dental al menos una vez al día o irrigadores dentales, antes de acostarse.
En cuanto a los retenedores removibles, al poder retirarlos cómodamente, se pueden limpiar más fácilmente. Eso sí, durante la limpieza es importante extremar las precauciones para no perderlos, y también para no romperlos. Estos deben lavarse con agua fría, nunca introducirse en agua hirviendo o al vapor y se deben desinfectar con pastillas específicas de limpieza de prótesis.
Conclusión
En nuestra clínica dental en San Vicente del Raspeig siempre finalizamos el tratamiento de ortodoncia con la colocación de retenedores, dando a nuestros pacientes todas las indicaciones y recomendaciones necesarias para su correcta utilización, y así conseguir los mejores resultados tras la ortodoncia.
