Como ya sabes, existen diferentes tipos de tratamientos de ortodoncia que se engloban en los siguientes grupos: ortodoncia tradicional, que consiste en un tratamiento de brackets metálicos, ortodoncia estética, de zafiro y cerámica, y ortodoncia invisible, que puede ser ortodoncia invisible Invisalign (o otros sistemas) y ortodoncia lingual Incógnito.
Y hoy, en la Clínica Dental Consuelo Flores nos vamos a centrar en la ortodoncia lingual Incógnito, que es uno de los tratamientos más demandados por aquellos pacientes que precisan de ortodoncia, pero quieren que pase desapercibida a la vista. Y a continuación te vamos a contar porqué.
¿En qué consiste la ortodoncia lingual?
La ortodoncia lingual consiste en un tratamiento de ortodoncia tradicional de brackets metálicos, con la particularidad de que los brackets se colocan en la cara interna de los dientes. Esto permite que los brackets queden invisibles a la vista de los demás, a no ser que miren directamente en el interior de la boca.
Es una muy buena opción para aquellas personas que precisen de ortodoncia y tengan que mantener su imagen, ya que además de pasar totalmente desapercibida a la vista, es capaz de conseguir los mismos resultados que un tratamiento de ortodoncia tradicional de brackets, corrigiendo problemas dentales como el apiñamiento, la mordida abierta, mordida cruzada, sobremordida, etc.
Otras de las ventajas de la ortodoncia lingual Incógnito es que facilita la higiene dental y no daña la superficie de los dientes, gracias a la acción de autolimpieza de la lengua y a la mayor concentración de saliva, que evita la descalcificación.
¿Cuánto dura un tratamiento de ortodoncia lingual?
La duración de un tratamiento de ortodoncia lingual dependerá de cada paciente, o mejor dicho, de la complejidad de los problemas a tratar. Pero por lo general, suele tener una duración de entre 18 y 24 meses.
La primera fase del tratamiento consiste en la retención, y se centra en conseguir que los dientes vuelvan a su posición original.
Una vez los dientes han vuelto a su posición natural, el objetivo es mantener esa posición y consolidarla. Para ello es necesario la colocación de retenedores, que pueden ser fijos o removibles.
Los retenedores fijos son unas láminas de alambre cementadas a la cara lingual del diente. Se caracterizan por ser totalmente imperceptibles, y por tener que llevarse a lo largo del tiempo.
Por otro lado están los retenedores removibles, que son unas férulas transparentes realizadas a medida, que deberán llevarse durante todo el día.
¿Es dolorosa la ortodoncia lingual?
La ortodoncia lingual no es dolorosa, aunque sí puede ocasionar ligeras molestias en el habla y la masticación durante la fase de adaptación.
Asimismo, también podría generar molestias tras las revisiones al ortodoncista, debidas a la presión ejercida por el aparato en los dientes, pero en ningún caso producirá dolor.
Estas molestias pueden aliviarse a través de analgésicos, si así lo recomienda el especialista.
Consejos a seguir en un tratamiento de ortodoncia lingual
La ortodoncia lingual no es dolorosa ni daña los dientes, pero sí dificulta el acceso al interior de nuestra boca, por ello es fundamental aumentar la higiene para evitar la aparición de caries y de enfermedades periodontales como la gingivitis o la periodontitis.
Es necesario cepillarse siempre los dientes después de cada comida, completando el cepillado con el uso de colutorios dentales e irrigadores bucales.
Asimismo, debido al roce del aparato con la mucosa, podrían aparecen pequeñas heridas o llagas en la boca. Si esto ocurre, habría que utilizar cera especial para ortodoncia para aliviar estas molestias. También está recomendado realizar enjuagues con agua y sal, así como evitar alimentos ácidos.
Una de las urgencias dentales más habituales en la ortodoncia lingual son los brackets despegados. Esto aparece principalmente al masticar alimentos difíciles de masticar.
Por último, para garantizar los buenos resultados de la ortodoncia lingual, es fundamental cumplir con todas las revisiones pautadas por el ortodoncista, para que así pueda comprobar que el tratamiento está avanzado correctamente.
Conclusión
En definitiva, la ortodoncia lingual se muestra como una de las mejores soluciones para aquellas personas que necesiten mejorar la posición de sus dientes, consiguiendo unos excelentes resultados y manteniendo la estética, ya que los brackets pasan totalmente desapercibidos a la vista.